26 septiembre 2006

Un trocito de poema

(...)Todo el amor para esos ojos.
El cielo entero para esos ojos.
El mar entero para esos ojos.
La tierra entera para esos ojos.
La eternidad para esos ojos.

Alberti, Rafael. Los ojos de Picasso.

25 septiembre 2006

Una montaña rusa

Una montaña rusa es el amor, o mi amor por ti quien sabe, no voy a ser tan presuntuosa como para pretender conocer EL AMOR así con mayúsculas.

Despegamos un día (hace ya mil años) muertos de miedo y excitación, era todo tan desconocido y tan nuevo. Nuestras emociones subían y subían, nuestros estómagos revoloteaban y casi no podía ni respirar, era como la subida a una montaña rusa y en esa subida nos abrazábamos como si nos fuese la vida en ello, no había límites, no había cumbre…

En un momento todo se estabilizó, no sé como ocurrió pero las mariposas se escaparon de nuestros estómagos o quizá se acostumbraron a vivir en ellos. Nuestro cochecito avanzaba por una recta sin curvas y sin obstáculos, el camino se hacía conocido ya no había miedos pero también empezó a faltar la emoción.

Caímos, perdí pié, sentía que todo se perdía, volvía la emoción pero esta vez no era divertido. Nos invadió la angustia, miedo a la pérdida, a no sentir, a perder el amor…y un día cuando parecía que nos estrellaríamos irremediablemente, nuestro cochecito volvió a subir, lentamente, subía y subía…y volvimos a morirnos de amor.

Durante estos años hemos vivido bajadas y subidas, trayectos tranquilos y placenteros y trayectos aburridos, hasta han aparecido nuevas atracciones que podían parecer más divertidas que nuestra montaña rusa. Pero hemos luchado mucho, unas veces tú y otras yo y casi siempre juntos.

Estoy convencida de que nuestro trayecto es circular, entendiendo circular como infinito, no hay meta. Lo más interesante de todos estos años en los que hemos estado juntos ha sido viajar contigo. Hemos caminado juntos y en ocasiones, había tantos obstáculos en el camino que nuestras manos se separaban. Hemos conocido los trayectos sin interferencias, dulcemente monótonos. Hemos aprendido a saber con sólo mirarnos, a conocernos sin llegar a perdernos. Hemos conocido la desgana y la apatía, hemos conocido la tentación, la atracción por el peligroso juego de la seducción…pero no hemos sucumbido a ello. Te quería y me querías, en ocasiones pese a nosotros mismos. Hemos sabido reinventar nuestra montaña rusa y recorrer trayectos nuevos, hemos sabido volver a emocionarnos y zarandear a las mariposas para que revoleteen de nuevo.

Tenemos un pasado lleno de vivencias que recordar, vivimos intensamente este presente y hoy soñamos juntos, ilusionados, con nuestro futuro…TE AMO

14 septiembre 2006

Mi ventana

Últimamente no levanto cabeza y no es que éste sea mi peor momento la verdad, sólo estoy cansada. Los últimos años han sido bastante intensos laboralmente y me está pasando factura. Creo que es la primera vez en mi vida que pienso en la jubilación ( y eso que quedan mil años para ello).
Lo cierto, es que aceptar este trabajo ha terminado siendo un tremendo error. Sé que prometía ser una gran oportunidad laboral pero está acabando conmigo, con mi alegría, con mi interés por relacionarme y conocer gente, a veces casi no me reconozco. Estar tanto tiempo sóla en el despacho está acabando conmigo, tanta competitividad, el no poder ser tú durante 9 horas al día está haciendo que me pierda, y encima, ¡mi ventana da a una maldita pared blanca!.
Estos últimos días ha estado lloviendo y me he estado acordando de la ventana de mi anterior trabajo. Era enorme y daba a un edificio de principios de siglo casi en ruinas, había árboles y aunque no es que trabajara en el campo, sino que estaba en la ciudad, estaba orientada de tal forma que no veía ni un coche, ni la calle. En ese trabajo me quedaba muchas veces hasta tarde sóla, y cuando llovía era un verdadero gustazo. Podías ver el cielo gris y la lluvia caer y me sentía tan bien...en aquel sitio podía ser yo y me querían. Mantengo contacto con mucha de esa gente pero ya no son compañeros de trabajo sino amigos; ahora durante 9 horas al día o estoy sóla o con gente de la que no confío y la verdad no sé como llevarlo, nunca antes me había pasado.

11 septiembre 2006

Que la tierra me trage

Hoy es uno de esos días en los que más me hubiese valido no haberme levantado...Hoy me he incorporado de las vacaciones y como no podía ser menos he llagado tarde, no me dió tiempo de tomarme un café, me ha bajado la regla y en menos de diez minutos voy a tener que enfrentarme a mi jefe y por el tono de sus 20 mensajes electrónicos me espera una buena bulla...
En fin, mañana será otro día...